CARTAS AL DIRECTOR - Abraham Méndez

¡CANÍBALES!

Una persona se puede convertir en caníbal si de ello depende su vida o la de los suyos. La película Vivir, que recuerda la catástrofe de un avión es un ejemplo de subsistencia. Los antropófagos se daban en sociedades incultas, con miseria y pocos recursos y mataban a sus enemigos o congéneres y se los comían entre ritos y danzas religiosas. Muchos chistes se han hecho sobre el tema, en el TBO aparecía un cazador, hasta con su salacot, lo estaban guisando unos salvajes con hueso en la nariz, dentro de una gran olla y mientras el caldo hacia ¡chup, chup! el mismo probaba las patatas y decía ¡aún están duras!.

Un trabalenguas catalán que se utiliza para intentar pronunciar bien el idioma dice así: ”Setze jutges d’un jutjat, mengen fetge d’un penjat, si el penjat és despenja es menja els fetges dels jutges que l’han jutjat”. Trata de unos jueces que se comen el hígado de un ahorcado, pero si el reo se descuelga se come los higadillos de los jueces. Esto viene a cuento, porque una noticia nos alarmó. El actor Tom Cruise dijo una barbaridad que se ¡comería la placenta de su hijo recién nacido¡. ¡Puaff, que asco!. Hasta por internet se pujó para saber como se comería el caníbal de turno la “casquería humana”, si con patatas fritas, en tortilla o al ajillo.

Pero el summun de lo paranoico es que unos asaltatumbas en Perelada (Girona) han abierto un nicho, extraído los huesos del difunto de hace 9 años, los han puesto en una olla a hervir, han hecho un caldo y en un aquelarre de brujería y orgía, parece que, se lo han bebido, como si fueran una secta satánica o caníbales hambrientos. La policía baraja si es una gamberrada, una venganza o un juego de rol. Yo creo que son unos bastardos repugnantes y asquerosos profanadores del último lugar que nos queda en el mundo, el descanso eterno. Estos tíos deben estar en un manicomio o cuando los coja la policía, los jueces les deben enseñar a cocinar o a ser vegetarianos, pero entre rejas.