CARTAS AL DIRECTOR - Abraham Méndez

Para ser un catalanista o españolista no necesito afiliarme a ningún partido que me otorgue una credencial o certificado de autenticidad. Todo lo que hoy es España tiene países diferentes y uno se puede sentir gallego-español, vasco-español, catalán-español y viceversa. Y no pasa nada, no se rompe España, ni la convivencia ciudadana. En una sociedad que acepta la Constitución, en un espacio de libertad y democracia, todo es posible. Mis profundos sentimientos de arraigo a un lugar, por ejemplo Cataluña, no empaña mi visión de España, Europa y del Mundo. Es decir intento no cerrarme en una sola ideología, porque mi espíritu, mi cerebro admite más amplitud de miras, planteamientos y pensamientos diversos.

Refundar un catalanismo como pretende el señor Artur Más de CdC (Convergencia Democrática de Catalunya), cuando no hace ni caso a su socio de coalición UDC (Unió Democrática de Catalunya) que ambos conforman CiU, y posterga al señor Durán Lléida, no parece la mejor forma de levantar una casa por los cimientos, sí no por el tejado. En esa nueva Casa del Catalanismo está claro que no dejan entrar a todos. A los valores sempiternos y la herencia positiva que conlleva el ser catalán o de otro lugar, no se deben renunciar jamás, son raíces tan profundas que se llevan en los genes y han sido transmitidos de por nuestros antepasados, aunque ello no debe otorgar un plus de pedigrí. El idioma propio, el catalán en este caso, se debe potenciar, hablar, leer y escribir con naturalidad, pero sin dejar de hablar el común a todos: el español. Los emigrantes tenemos el mismo derecho a sentirnos catalanes, pero sin etiquetas. Soy descendiente de Aragón (madre) y León (Padre) y nací en Madrid por lo cual no puedo, ni quiero renunciar a mis orígenes y enfundarme en un catalanismo excluyente Tampoco quiero ser un cerril españolista que no respeta al resto de compatriotas con ideologías diferentes.

Es por ello que debemos apostar por un Estado Federal, unido al resto de las Naciones de España, pero totalmente independientes de un Estado Centralizado. Quiero seguir sintiéndome español y de la otra nacionalidad que quiera o elija. No tengo porqué renunciar a mi doble identidad. Las propuestas políticas del señor Artur Más no me gustan porque me amordazan. Yo creo en otro tipo de propuestas, no sólo políticas como: Las acciones sociales, cívicas, solidarias, reducción de impuestos, ayudas a jóvenes y ancianos, salarios dignos, hipotecas bajas, empresas a pleno empleo, hospitales, Juzgados y cárceles vacías, museos llenos, protección a la mujer, a la infancia, a menesterosos, a enfermos, ayudas al campo, pesca, ganadería, libertad de culto, más escuelas, Universidades, educación, centros de formación… ese es el reto y secreto de una sociedad moderna en una casa común. Hoy defiendo un Estatut fuerte para Cataluña y el resto de Autonomías, mañana el Estado Federal como fin al camino que estamos recorriendo juntos, en busca siempre de la paz, igualdad, libertad y hermandad.

ABRAHAM MÉNDEZ RAMOS – Escritor